Preparadora oposiciones infantil: Guía Completa del Tribunal a la Plaza

¡Hola, futuras maestras y maestros de Infantil! Si estáis metidos hasta el cuello en el emocionante (¡y a veces un poquito agobiante!) mundo de las oposiciones, seguro que la cabeza os echa humo con mil decisiones. Y una de las más gordas, de esas que quitan el sueño, es: ¿cómo narices elijo un buen preparador o preparadora? No es para menos, ¡compañeros! Esta elección puede ser el empujoncito que os falta para alcanzar la plaza o, seamos sinceros, un lastre que os frene en seco.

Así que, ¡al lío! He preparado esta guía con todo mi cariño y experiencia para echaros un cable. Quiero que tengáis las herramientas para decidir con cabeza, para que sepáis qué buscar y, sobre todo, para que afrontéis la preparación con la confianza por las nubes. ¡Vamos a por ello!

¿En qué te tienes que fijar para dar con tu preparador/a ideal en Infantil?

Mirad, esto no es como elegir qué serie ver esta noche. La elección de vuestro preparador/a es, posiblemente, una de las piedras angulares de vuestro camino hacia la plaza. No se trata solo de que alguien os suelte el temario y ¡hala!, a correr. Necesitáis un guía, un mentor, alguien que os acompañe de verdad, que os insufle ánimos cuando flaqueéis y que os ofrezca un método que se ajuste como un guante a las exigencias específicas de las oposiciones de Educación Infantil.

¿Qué cualidades definen a un preparador/a de Infantil que marque la diferencia?

Un preparador/a de Infantil que realmente os ayude a brillar debe tener una mochila cargada de unas cuantas cosas imprescindibles. Más allá de que se sepa el temario al dedillo, que eso se da por supuesto, apuntad bien:

Experiencia de la buena, ¡y demostrable!: Buscad a alguien que lleve años en esto, que haya visto pasar convocatorias y, si es posible, que tenga un buen historial de «alumnos que lo consiguieron». La experiencia no es solo conocer los temas, es entender el engranaje del proceso selectivo, saber qué es lo que el tribunal valora de verdad, esos pequeños detalles que marcan la diferencia.
Especialización en Educación Infantil, ¡a fuego!: Esto es crucial, de verdad. Que el preparador/a viva y respire la etapa de Infantil. El temario, la legislación (¡hola, LOMLOE!), los supuestos prácticos, la forma de enfocar la programación didáctica… todo tiene sus particularidades en 0-6 años. Un preparador generalista, aunque sea un crack en Magisterio, podría quedarse corto en los matices. Y ojo, que especialidades como Pedagogía Terapéutica, aunque cercanas, tienen su propio universo.
Dominio total del sistema de oposición: Debe conocerse cada rincón de las oposiciones: las distintas pruebas (¡ese temido examen teórico!, los supuestos prácticos, la defensa de la programación y la unidad didáctica), los criterios con los que el tribunal os va a mirar con lupa y, por supuesto, estar al día de los últimos cambios legislativos. Con la LOMLOE en pleno apogeo, esto es más importante que nunca.
Que sepa enseñar y conectar, ¡no solo soltar el rollo!: Un buen preparador/a no solo acumula conocimientos, ¡sabe transmitirlos! Necesitáis a alguien que explique las cosas de forma clara, que os dé una estructura y que os motive. Si además se maneja bien con vídeos explicativos claros y directos, ¡puntazo extra!
Materiales de calidad, ¡y con sello propio!: Importantísimo. Debe ofreceros material actualizado, currado y, a ser posible, de elaboración propia. Esto dice mucho del compromiso y del método del preparador/a. Hablamos de temarios completos, resúmenes que os salven la vida, esquemas visuales, supuestos prácticos resueltos y bien argumentados, y modelos de programaciones didácticas que os inspiren. Que sean materiales propios suele ser señal de que hay un trabajo profundo detrás.
Acompañamiento cercano y personalizado, ¡de tú a tú!: Preparar una opo es una carrera de fondo, y a veces una se siente más sola que la una. Un buen preparador/a tiene que estar ahí, implicado en vuestro progreso, resolviendo dudas, corrigiendo vuestros trabajos con críticas constructivas (¡de esas que ayudan a mejorar de verdad!) y ofreciendo pautas claras. Sentir ese apoyo constante es oro puro.
Legislación vigente en vena: El decreto curricular de vuestra comunidad autónoma y toda la normativa estatal (empezando por la LOMLOE) deben ser su pan de cada día. Esto es la base para el temario y, sobre todo, para clavar esa programación didáctica.
Chispa de innovación y creatividad: En Infantil, la creatividad no es un extra, ¡es un ingrediente esencial! Un preparador/a que os anime a innovar, a presentar una programación con un toque diferente y original, os puede ayudar a destacar y a dejar al tribunal con la boca abierta (para bien, claro).
Transparencia y honestidad, ¡sin medias tintas!: Desde el principio, las cosas claras: metodología, qué incluye la preparación, cuánto cuesta y, muy importante, qué podéis esperar de forma realista.

¿Qué no puede faltar en ese preparador/a estrella? Pues experiencia real con aprobados, que sea un auténtico forofo de la Educación Infantil, que se sepa el proceso selectivo como la palma de su mano, que tenga don de gentes y sepa enseñar, que os dé materiales que sean oro puro (¡y actualizados, por favor!), que camine a vuestro lado, que domine la LOMLOE y su aplicación, que os incite a ser creativos y que sea más transparente que el agua de un manantial. ¡Casi nada, eh! Pero es lo que necesitáis.

Online vs. Presencial: ¿Qué me conviene más para las opos de Infantil?

¡Ah, el eterno dilema! ¿Me meto en clases presenciales o me organizo desde casa con una preparación online? Pues mirad, no hay una respuesta única que valga para todos. Depende mucho de vuestra situación personal, de cómo seáis vosotros, de vuestro ritmo de vida y de lo que os funcione mejor para estudiar. Ambas tienen sus pros y sus contras, ¡vamos a verlas!

Preparación Presencial:

Lo bueno:
- Contacto directo: El cara a cara con el preparador/a y otros «opocompis» puede ser un chute de motivación y ayuda a crear piña.
- Dudas al instante: Levantas la mano y ¡zas!, respuesta al momento.
- Rutina que engancha: Ir a clase ayuda a coger un horario y a no perder el ritmo.
- Menos tentaciones de dejarlo para «luego»: El compromiso de ir físicamente a un sitio puede mantener a raya la procrastinación.
Lo no tan bueno:
- Rigidez de horarios: Si trabajas o tienes otras responsabilidades, puede ser un Tetris encajarlo.
- Desplazamientos: Tiempo y dinero que se van en ir y venir.
- Suele ser más cara: Las academias con clases físicas suelen tener tarifas más altas.
- Ritmo de grupo: A veces la clase va muy rápido para ti, o demasiado lenta, y te tienes que aguantar.

Preparación Online:

Lo bueno:
- Flexibilidad total: ¡Estudias cuándo y cómo quieres! Ideal si estáis preparando oposiciones mientras trabajáis.
- Desde cualquier rincón del mundo (o de tu casa): Solo necesitas internet.
- Ahorro para el bolsillo: Generalmente es más económica y te libras de los gastos de transporte.
- Materiales digitales a golpe de clic: Todo en una plataforma virtual: temario, vídeos explicativos (que puedes rebobinar mil veces), foros… Estas plataformas suelen usar herramientas como JavaScript para que la experiencia sea más fluida e interactiva, y a veces tiran de cookies (informática) para adaptar el contenido o ver cómo vas progresando. ¡Echadle siempre un ojo a la política de privacidad!
- A tu ritmo: Puedes repasar los contenidos más difíciles tantas veces como necesites.
Lo no tan bueno:
- Exige autodisciplina de hierro: Tienes que ser muy organizado/a y constante para no quedarte por el camino.
- Menos «vidilla» social: Aunque haya foros y tutorías online, no es lo mismo que el contacto directo.
- Dependencia tecnológica: Si falla internet o el ordenador, ¡drama!
- Sensación de soledad: Algunos opositores pueden sentirse un poco aislados.

Mi consejo: una preparadora de oposiciones infantil que ofrezca una modalidad online bien montada, con una plataforma que funcione de maravilla y unas pautas de seguimiento claras, puede ser tan efectiva o incluso más que la presencial. Sobre todo, si la flexibilidad es vuestra palabra mágica.

Los beneficios de contratar a un experto para tu TFG

La experiencia del preparador/a ante el tribunal: ¿Por qué es tan importante?

Esto es algo que a veces se nos pasa, pero ¡ojo!, la experiencia de un preparador/a no se mide solo en los años que lleva dando clase. Su conocimiento, ya sea directo o por tener buenos contactos, de cómo funcionan los tribunales de oposición, es un tesoro. Si ha sido miembro de tribunal, o se relaciona con profes que lo han sido, tiene información de primera mano sobre:

Qué valora de verdad el tribunal: Más allá de lo que ponga en la convocatoria, siempre hay matices y aspectos que solo se conocen «desde dentro».
Los errores típicos que te pueden costar caro: Conocer los fallos que se repiten año tras año permite a tu preparador/a ponerte sobre aviso.
Cómo bordar la defensa oral: La exposición de la programación y la unidad didáctica es un momento CRUCIAL. Un preparador/a con tablas te puede dar trucos y entrenamiento para que brilles.
El «idioma» del tribunal: Hay formas de hablar, de organizar las ideas y de presentar los contenidos que entran mejor por el ojo (y el oído) de quienes te evalúan.
Gestión del tiempo y los nervios: Te puede dar herramientas para enfrentarte a la presión del examen oral con más seguridad. ¡Que los nervios no te jueguen una mala pasada!

Esta experiencia es un plus que no se ve, pero que vale su peso en oro. No os cortéis y preguntad a los posibles preparadores sobre esto, sobre cómo esa vivencia se traduce en ventajas para vosotros.

¿Qué metodología usan los mejores preparadores de oposiciones de Infantil?

La metodología es el corazón de una buena preparación. Y os digo una cosa: no hay una única receta mágica. Lo que funciona de perlas para uno, puede no ser lo ideal para otro. Pero sí es verdad que los mejores preparadores suelen ser como buenos cocineros: mezclan ingredientes tradicionales con toques innovadores que le dan sabor al plato.

Lo clásico vs. lo nuevo: ¿Con qué nos quedamos?

Métodos de toda la vida:
- Clases donde el preparador/a explica el temario.
- Hincar codos para estudiar y memorizar.
- Hacer resúmenes y esquemas (¡un clásico que sigue funcionando!).
- Resolver supuestos prácticos «tipo examen».
- Correcciones, ya sean en grupo o individuales. Estos métodos siguen siendo la base, ¡imprescindibles para construir cimientos sólidos!
Toques innovadores que marcan la diferencia:
- Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP): Súper útil para darle forma a vuestra programación y unidades, fomentando la creatividad y conectando con la realidad del aula infantil.
- Gamificación: Usar dinámicas de juego para que aprender sea más divertido y motivador (¡piensa en tests interactivos, retos, insignias!).
- Clase Invertida (Flipped Classroom): Os empapáis del material teórico en casa (muchas veces con vídeos) y el tiempo con el preparador/a se usa para resolver dudas, debatir y aplicar lo aprendido. ¡Más práctico imposible!
- Recursos Multimedia a tope: Vídeos, podcasts, infografías molonas… todo lo que haga el contenido más visual y atractivo.
- Aprendizaje Colaborativo: Fomentar el trabajo en equipo entre opositores (¡siempre con guía, para que sea productivo!).
- Simulacros de examen que parezcan de verdad: No solo del escrito, ¡también de la defensa oral! Grabaros en vídeo para pulir detalles es una idea genial.
- Coaching Educativo: Un acompañamiento para gestionar el estrés, mantener la motivación a tope y mejorar vuestras habilidades para comunicar.
- Plataformas Online Interactivas: Esas que te permiten ver cómo avanzas, debatir en foros, entregar tareas y recibir correcciones de forma ágil. Como os decía antes, pueden usar JavaScript para ser más dinámicas y cookies (informática) para personalizar la experiencia.

Lo ideal es un preparador/a que sepa bailar entre estos dos mundos: la solidez de lo tradicional con la frescura y la chispa de lo innovador. ¡No tengáis miedo de buscar a alguien que se atreva a probar cosas nuevas y que os proponga metodologías activas!

El acompañamiento personalizado: ¡Ese extra que lo cambia todo!

Cada uno de vosotros sois un mundo: con vuestras fortalezas, vuestros puntos a mejorar, vuestro propio ritmo y vuestras circunstancias. Por eso, un acompañamiento «a medida» es fundamental. Una preparadora de oposiciones infantil que de verdad se implique, os ofrecerá:

Un plan de estudio que se adapte a TI: Ayuda para crear un calendario realista, que encaje con vuestra vida.
Tutorías individuales: Momentos para vosotros, para resolver esas dudas que no os dejan dormir, revisar cómo vais y recibir consejos personales.
Correcciones detalladas y constructivas: No vale un simple «esto está mal». Necesitáis que os expliquen el porqué y, sobre todo, cómo mejorarlo. Esto es vital para la programación y las unidades didácticas.
Feedback constante: Tanto de los temas como de vuestra forma de exponer.
Apoyo emocional y chute de motivación: Preparar una opo es una montaña rusa. Tener a alguien que os entienda y os anime en los bajones, ¡no tiene precio!
Comunicación fluida: Que sea fácil contactar con vuestro preparador/a (email, mensajería, foros…).

Este acompañamiento es lo que de verdad os hará sentir seguros y respaldados para preparar vuestra oposición de infantil con garantías.

¡Al día con la LOMLOE! Contenidos siempre frescos

La legislación educativa no para quieta, ¡y la LOMLOE ha venido para quedarse y ha traído cambios importantes! Afecta al currículo de Infantil, a cómo entendemos la enseñanza y a cómo se evalúa. Un buen preparador/a tiene que:

Estar más al día que un telediario: Conocer la LOMLOE al dedillo, y cualquier decreto o normativa de vuestra comunidad que la desarrolle.
Tener el temario niquelado: Asegurarse de que todos los temas reflejan la ley actual. ¡El material actualizado no es negociable!
Adaptar la Programación Didáctica a los nuevos tiempos: Guiaros para que vuestra programación y unidades didácticas respiren los nuevos enfoques pedagógicos y evaluativos, incluyendo las famosas situaciones de aprendizaje.
Saber «traducir» la ley: No solo conocerla, sino entender cómo se aplica en el día a día del aula y cómo plasmarlo para que el tribunal lo vea claro.

Preguntad sin tapujos cómo abordan la actualización de contenidos y cómo integran la LOMLOE en su método. ¡Es vuestro derecho y su deber!

Hablemos de «pasta»: ¿Cuánto cuesta prepararse las opos de Infantil?

El dinerillo es un factor que, lógicamente, preocupa. Los precios pueden bailar bastante según el tipo de preparador/a y si es online o presencial.

Academias vs. Preparadores Particulares: Precios orientativos

Academias de Oposiciones:

Presenciales: Las mensualidades suelen rondar entre los 120€ y los 200€, incluso más en ciudades grandes o academias con mucho nombre. A veces hay que sumar matrícula y materiales aparte.
Online: Generalmente más baratitas, con mensualidades que pueden ir de los 80€ a los 150€. Algunas ofrecen paquetes cerrados.

Academias de Oposiciones:

Presenciales: Si vais por horas sueltas, puede salir más caro que una mensualidad de academia, pero la atención es mucho más individual. Podrían estar entre 25€ y 50€ la hora, o tarifas mensuales si acordáis un plan de trabajo (por ejemplo, 100€ – 300€ al mes por X sesiones y correcciones).
Online: Similar a los presenciales, pero a veces con precios un poquito más ajustados al tener menos gastos. Un preparador particular online puede ser una opción fantástica para una preparación súper personalizada.

Es fundamental que os den un desglose clarito de qué entra en el precio: temario, número de correcciones, tutorías, acceso a la plataforma, etc. ¡Que no haya sorpresas!

La relación calidad-precio: ¡Que no os den gato por liebre!

Ni lo más caro es siempre lo mejor, ni lo más barato tiene por qué ser una birria. La clave está en valorar qué os ofrecen por vuestro dinero. Tened en cuenta:

La experiencia y especialización del preparador/a (¡recordad, en Infantil!).
La calidad y lo actualizado que esté el material.
Cómo y cuánto os van a acompañar de forma personalizada.
Los resultados que han tenido otros alumnos (¡si se pueden contrastar, mejor!).
Opiniones y testimonios (buscad más allá de su web o Instagram; los foros de opositores suelen ser un buen termómetro).

Invertir en un buen preparador/a es invertir en vuestro futuro. A veces, pagar un poquito más por un servicio de calidad que de verdad aumente vuestras opciones de sacar la plaza es la decisión más inteligente.

¿Y si el bolsillo aprieta? Opciones para financiar la preparación

Prepararse una opo es un esfuerzo económico, lo sabemos. Algunas ideas:

Ahorrar como hormiguitas: Si podéis, planificad con tiempo.
Pago a plazos: Muchas academias y algunos preparadores lo ofrecen. ¡Preguntad!
Ayudas o becas: No son muy comunes para este tipo de formación, pero nunca está de más investigar si en vuestra comunidad hay algo.
Préstamos para formación: Algunos bancos tienen opciones. Valoradlo con calma y solo si es necesario.

Lo importante es ser realistas con vuestro presupuesto y elegir una opción que podáis asumir sin que os genere más estrés del necesario.

La Programación Didáctica en Infantil: Tu obra maestra para aprobar

¡Ay, la programación didáctica! Esa joya de la corona, vuestra carta de presentación ante el tribunal. Aquí no solo demostráis que domináis el currículo y la metodología de Infantil, sino que sois capaces de planificar el día a día de un aula de forma coherente, con chispa y adaptada a los peques.

Estructura y elementos clave de una programación que enamore al tribunal

Una programación de Infantil para oposiciones tiene que estar fetén, bien estructurada y con todos los ases en la manga que pide la convocatoria, siempre adaptada al decreto curricular de vuestra comunidad y, por supuesto, a la LOMLOE. Los imprescindibles suelen ser:

Introducción y Justificación:
- Presentación de vuestra propuesta.
- Contexto: un cole inventado pero creíble, con las características de vuestros alumnos (grupo de edad, necesidades…).
- Por qué vuestra programación es la caña, basándoos en la ley y en lo que necesitan esos peques.
Objetivos:
- Los generales de la etapa y de área que tocáis.
- Los objetivos didácticos de vuestra programación: claros, que se puedan medir y que sean realistas.
Contenidos:
- Qué vais a enseñar y en qué orden, de las tres áreas de Infantil: Crecimiento en Armonía; Descubrimiento y Exploración del Entorno; y Comunicación y Representación de la Realidad.
- Cómo vais a integrar los temas transversales (educación en valores, igualdad, sostenibilidad… ¡el Diseño Universal para el Aprendizaje – DUA os puede dar muchas pistas aquí!).
Metodología:
- Vuestros principios estrella: aprendizaje significativo, globalización, ¡el juego como motor de todo!, actividad, atención individualizada, socialización, creatividad…
- Cómo vais a organizar los espacios, los tiempos y los materiales.
- Vuestro papel como profes y el de los peques.
- Atención a la diversidad: Medidas para todos y, si hace falta, más específicas. Aquí podéis mencionar cómo colaboraríais con compis de Pedagogía Terapéutica si el contexto lo requiere. ¡La inclusión es la clave!
Unidades Didácticas (o Situaciones de Aprendizaje, según el enfoque LOMLOE):
- Un listado de las unidades que componen la programación (título, cuándo las haríais, un pequeño resumen).
- El desarrollo completo de una o varias unidades (lo que pida la convocatoria) con todos sus apartados: objetivos didácticos, contenidos, actividades chulas, metodología, recursos, y cómo vais a evaluar.
Evaluación:
- Criterios e indicadores (¡conectados con los objetivos!).
- Instrumentos y técnicas: observación directa, diario de clase, lo que hagan los niños…
- Momentos: al principio, durante el proceso y al final.
- Cómo vais a mantener informadas a las familias.
Colaboración con las Familias:
- Cómo vais a comunicaros y trabajar codo con codo con ellas.
Conclusión y Bibliografía:
- Un cierre potente.
- Listado de leyes y libros que habéis usado.

Una programación diferente, bien argumentada, con vuestro toque personal y que respire LOMLOE por los cuatro costados, ¡es lo que os abrirá las puertas de la plaza!

Unidades didácticas innovadoras: ¡A dejar al tribunal con la boca abierta!

Para que vuestras unidades didácticas (o situaciones de aprendizaje) no sean «una más», ¡toca innovar y sacar la varita mágica de la creatividad! Algunas ideas para inspiraros:

Temáticas originales y que enganchen: Que conecten con lo que les mola a los niños y os permitan trabajar todo de forma globalizada.
Integración de las TIC con sentido: Pizarras digitales, tablets, apps educativas… pero que aporten valor, no por postureo.
Aprendizaje Basado en el Juego (ABJ): ¡El juego es el idioma de la infancia! Diseñad actividades lúdicas que sean el motor del aprendizaje.
Proyectos de Trabajo: Que partan de los intereses de los peques y les hagan protagonistas.
Enfoque STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Arte y Mates): Adaptado a su edad, para fomentar la curiosidad y que experimenten. ¡Hay mil propuestas de metodologías activas aquí!
Actividades sensoriales y manipulativas: ¡Imprescindibles en Infantil!
Salidas y experiencias directas: Conectar el aula con el mundo real.
Propuestas que despierten la creatividad y el pensamiento crítico: Que no solo repitan, ¡que creen y piensen!

Es fundamental que vuestro preparador/a os guíe para desarrollar unidades que cumplan con el currículo, que sean rigurosas y que, a la vez, resulten atractivas y muestren vuestra pasión por enseñar a los más pequeños.

Errores típicos al hacer la programación de Infantil: ¡Evítalos como la peste!

Meter la pata aquí puede costar caro. ¡Ojo con estos fallos!:

Descontextualizar: No adaptar la programación a un cole y a unos niños concretos (aunque sean inventados, ¡que tengan lógica!).
Incoherencia interna: Que los objetivos digan una cosa, las actividades otra y la evaluación otra distinta. ¡Todo tiene que ir de la mano!
Copiar y pegar: Presentar programaciones de internet o de otros. El tribunal tiene el ojo muy fino para esto. ¡Sed originales!
No dominar la legislación: No basar la programación en la LOMLOE y el decreto de vuestra comunidad. ¡Suspenso directo!
Metodología poco clara o irreal: Proponer cosas que son imposibles de hacer en un aula de Infantil.
Evaluación de «estar por casa»: No detallar bien cómo, cuándo y con qué vais a evaluar.
Falta de chispa: No aportar vuestro toque personal o alguna idea innovadora.
Pasarse de páginas o presentarla hecha un desastre: Ajustaos a los límites y cuidad la presentación.
Faltas de ortografía o gramática: ¡Restan muchísimos puntos y dan muy mala imagen!

Una buena preparadora de oposiciones infantil os ayudará a pulir vuestra programación para que sea una auténtica obra de arte y a esquivar todos estos errores.

¿Qué materiales son imprescindibles y te los debe dar tu preparador/a?

Los materiales son vuestros ladrillos para construir el edificio del aprobado. Un preparador/a de calidad os tiene que surtir de:

Temario actualizado y todos los recursos didácticos que necesitas

Temario completo y al día: Desarrollado según la convocatoria y con todos los cambios de la LOMLOE. Tiene que ser claro, riguroso y bien estructurado. Si son materiales propios del preparador/a, ¡mucho mejor! Eso demuestra que hay un trabajo específico y profundo detrás.
Resúmenes y esquemas: Para que estudiar y repasar sea más llevadero.
Mapas conceptuales: Para ver las ideas conectadas.
Glosario de términos clave: Súper útil para la jerga pedagógica y legislativa.
Recursos multimedia: Acceso a vídeos explicativos, presentaciones, enlaces interesantes… normalmente a través de una plataforma online.

Supuestos prácticos resueltos y bien comentados, ¡para coger callo!

La prueba de supuestos prácticos es donde demostráis que sabéis aplicar la teoría a situaciones reales del aula. Vuestro preparador/a debe daros:

Una buena colección de supuestos, ¡variaditos!: Que toquen diferentes temas (desarrollo de los peques, atención a la diversidad, organización del aula, cómo resolver conflictos, colaboración con las familias, etc.).
Supuestos resueltos paso a paso: No solo la solución, sino cómo se llega a ella, el razonamiento.
Comentarios y pautas: Explicaciones de por qué una solución es la buena, otras opciones y los errores que no debéis cometer.
Práctica, práctica y más práctica: Proponeros resolver supuestos y daros correcciones individuales.

Acceso a la legislación y documentos oficiales, ¡bien explicaditos!

Es vital tener a mano y bien organizado:

La legislación clave, tanto estatal como de vuestra comunidad: LOMLOE, Reales Decretos de enseñanzas mínimas, el decreto curricular de vuestra autonomía, órdenes de evaluación…
Documentos oficiales importantes: Guías del Ministerio, informes sobre Educación Infantil…
Interpretación y aplicación: El preparador/a debe ayudaros a entender cómo se traduce toda esa «letra pequeña» en el día a día de un maestro/a y en las pruebas de la opo. ¡El material actualizado aquí es fundamental!

¿Cuánto tiempo necesito para preparar las opos de Infantil? ¡La pregunta del millón!

Preparar las opos de Infantil es una maratón, no un sprint. No hay un cronómetro exacto, porque depende de un montón de cosas.

Planifica tu estudio según tu vida, ¡sin agobios!

Opositores a tiempo completo: Podríais dedicarle entre 6 y 8 horas al día. Con buena organización, en 1 o 2 años podríais estar listos para la batalla.
Opositores que curráis o con familia: El tiempo es más ajustado, así que el camino puede alargarse a 2-3 años o incluso más. Aquí la clave es ser súper eficientes con cada ratito de estudio.
Conocimientos previos: Si ya tenéis una buena base de la carrera o habéis opositado antes, quizás necesitéis menos tiempo.
Vuestra capacidad de estudio y constancia: Estos son factores muy personales que influyen un montón.

Lo más recomendable es ser realistas y no pensar que esto se saca en dos tardes. ¡Empezar a prepararte con antelación es vuestro mejor as en la manga!

Horarios para opositores currantes: ¡Sí se puede!

Si estáis preparando oposiciones y trabajando, la organización es vuestra mejor amiga. ¡Palabra de Pilu!

Madrugar es de guapas (y de listos): Estudiar antes de ir al curro, con la mente fresca, ¡cunde el doble!
Tardes/noches: Sacad un hueco después del trabajo, aunque sea más cortito.
Fines de semana: Bloques de estudio más largos, ¡pero sin olvidaros de descansar, por favor!
Ratos muertos, ¡ratos aprovechados!: En el bus, en la pausa para comer… cualquier momento es bueno para repasar o escuchar un vídeo explicativo.
Metas realistas, ¡pasito a pasito!: No intentéis abarcar demasiado cada día para no frustraros.

Una buena preparadora de oposiciones infantil os ayudará a diseñar un plan de estudio que sea compatible con vuestro trabajo y vuestra vida.

El sprint final: A tope los meses antes del examen

Los últimos 3-4 meses antes del día D son cruciales. ¡Es el momento de darlo todo!

Repaso intensivo del temario: A consolidar todo lo aprendido.
Simulacros a gogó: Tanto del examen escrito como de los supuestos.
Ensayo de la exposición oral, ¡una y otra vez!: Practicad la defensa de la programación y la unidad didáctica. Si podéis, grabaos en vídeo y pedid feedback.
Mimos para vosotros: Buena alimentación, descanso y a gestionar el estrés.

Es el último empujón, y el apoyo de vuestro preparador/a aquí será vuestro salvavidas.

¿Qué resultados consiguen los alumnos con los mejores preparadores? ¡Queremos datos!

Al final, los resultados son la prueba del algodón, ¿verdad?

Tasas de éxito y plazas conseguidas: ¿Realidad o ficción?

Preguntad sin miedo al preparador/a o academia por sus tasas de aprobados y de gente que ha sacado plaza.
Pero ¡ojo!, sed un poco escépticos con cifras demasiado espectaculares o que no se puedan comprobar. Un buen preparador/a será transparente y honesto.
Recordad que el éxito es una mezcla del buen hacer del preparador/a y de vuestro esfuerzo y dedicación. ¡El objetivo es que, juntos, consigamos la plaza!

Testimonios de maestras de Infantil que ya lo han logrado

Buscad opiniones de antiguos alumnos. Los foros, las redes sociales (como Instagram, pero siempre contrastando) o incluso el propio preparador/a (si os puede poner en contacto con ellos) son buenas fuentes.
Los testimonios os darán una idea real de cómo ha sido la experiencia de otros opositores, qué tal la metodología, la calidad de sus materiales propios y el tipo de acompañamiento que ofrece.

Cómo asegurarte de que vas por el buen camino durante la preparación

Compromiso y constancia: Son la base de todo. ¡No hay atajos!
Participación activa: Preguntad dudas, intervenid en clase o en los foros, entregad los trabajos a tiempo.
Autocrítica constructiva: Analizad vuestros fallos y aprended de ellos.
Feedback del preparador/a: Escuchad con atención sus correcciones y consejos. ¡Están para ayudaros!
Mantened la motivación por las nubes: Recordad por qué estáis haciendo esto y celebrad cada pequeño logro.
Comunicación con vuestro preparador/a: Si tenéis dificultades o necesitáis ajustar el plan, ¡habladlo! Una preparadora de oposiciones infantil que se implique de verdad estará ahí para echaros una mano.

En fin, equipazo, encontrar al preparador o preparadora ideal es un pasito de gigante en este camino. Tomáoslo con calma, investigad, preguntad todo lo que necesitéis, ¡no os cortéis un pelo! Y elegid a esa persona que no solo os dé el temario, sino que os inspire, os guíe con cabeza y os dé ese empujoncito que a veces tanto necesitamos.

Este camino es duro, ¡quién os diga lo contrario os está vendiendo una moto!, pero con la ayuda adecuada y vuestro esfuerzo titánico, ¡esa plaza de maestro o maestra de Educación Infantil puede y DEBE ser vuestra!

¡A por todas, valientes, y muchísima suerte en vuestra opo! ¡Confiad en vosotros, porque yo ya lo hago!

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